En realidad creo que me equivoqué al tomar este libro como el segundo de Tolstoi para leer, debí haber empezado por otros famosos del mismo autor, pero asi se dieron las circunstancias.
La introducción del libro la calificaba como "descarnada" y contaba como casi fue censurada en su época y muy criticada. Particularmente parece una historia contada por el protagonista que se debate en una pelea psicológica por entender los hechos que lo llevaron al momento culmen en que mató a su esposa. No, no estoy arruinando la historia, desde el principio se sabe que la historia terminará en que el relator mata a su esposa, pero el escritor pinta la descripción y las narraciones del hombre con tal estilo, que el lector se queda pegado al libro queriendo conocer más sobre esas teorías del asesino y las razones que lo llevaron hasta ese punto.
En el medio el relator condena fríamente al matrimonio, a los hijos, al amor como elementos de la vida que se interponen en la libertad del hombre y que sólo le generan sufrimiento y expone sus razonamientos con tal vehemencia que es dificil no encontrar uno que otro punto de encuentro. La mujer se vuelve uno de sus objetivos más duros, aunque también en ocasiones la justifica como víctima de una sociedad machista. Definitivamente no un libro que le agradará leer a una feminista, pero es interesante conocer la forma como se conceptualizaba a la mujer y la forma como la misma mujer actuaba en consecuencia.
De este libro no citaré frases, y es raro que suceda así cuando lo considero una obra maestra, pero aunque no soy feminista, no puedo considerar sus teorías como dignas de replicarse o citarse. Es al final, un libro, y como tal, la expresión de su autor que particularmente dejó fluir muchas de sus frustraciones en la obra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario